Dos personas murieron y cinco resultaron heridas en un tiroteo ocurrido este viernes 3 de octubre en Niza, cerca de un punto de venta de droga en el barrio de Moulins, al oeste de la ciudad. Según el fiscal de Niza, Damien Martinelli, algunos heridos no están relacionados con el tráfico de estupefacientes, lo que sugiere que los disparos afectaron a personas presentes de manera indiscriminada.
El ataque se produjo alrededor de las 21:10 horas cuando los agresores dispararon desde un vehículo Peugeot 3008. En el lugar hallaron 25 casquillos calibre 7,62 mm, correspondiente a un fusil de asalto kalashnikov, y cinco casquillos de 9 mm, aunque no se pudo determinar si estos últimos provienen de los atacantes o de un posible contraataque.
Las víctimas fatales nacieron en 1966 y 2005, confirmando que un adolescente perdió la vida en el incidente. Entre los heridos, además de dos adolescentes, el resto nació entre 1980 y 2002. Por ahora, ninguna de las cinco personas heridas corre riesgo vital.
En la madrugada del mismo día, se encontró un vehículo calcinado en Mougins, a 25 km de Niza. Se presume que es el carro usado por los agresores, que había sido robado el 30 de septiembre en Marsella y circulaba con placas falsas.
El fiscal anunció la apertura de una investigación por “homicidios voluntarios en banda organizada y tentativas de homicidio voluntario en banda organizada”. La investigación está a cargo de la policía judicial de Alpes-Maritimes y de la dirección zonal de policía de Bocas del Ródano.
La violencia marcada por el uso de armas automáticas y el gran número de disparos confirma la gravedad del episodio, en un barrio ya bajo vigilancia por actividades relacionadas con el narcotráfico.
Los investigadores continúan analizando las circunstancias y la posible implicación de los atacantes, mientras que la comunidad local permanece en alerta tras el suceso.
