Unos 12,000 hogares siguen sin electricidad en Escocia tras el paso de la tormenta Amy que entró el viernes con vientos de hasta 100 mph, causando daños severos y trastornos en el transporte.
Scottish and Southern Electricity Networks (SSEN), responsable del suministro en el norte de Escocia, informó que hasta las 21:00 horas del domingo habían reconectado a 76,000 clientes. Más de varios cientos de ingenieros y expertos en arboricultura continúan trabajando en condiciones difíciles para restablecer la energía a las zonas afectadas, principalmente en las Highlands y comunidades en Argyll and Bute.
SSEN destacó la llegada de equipos adicionales de otras regiones del Reino Unido para acelerar la reparación de la red. El jefe de operaciones, Nik Wheeler, dijo que la limpieza y el acceso a las áreas dañadas siguen siendo retos por la caída de árboles y escombros, y agradeció la paciencia de los clientes afectados.
El sistema ferroviario también sufrió grandes daños. ScotRail anunció que la mayoría de los servicios ya funcionan tras reparaciones de urgencia, pero algunas líneas remotas permanecían cerradas, como la conexión Far North Inverness/Wick/Kyle, y afectaciones parciales en la ruta Oban/Fort William/Mallaig.
La compañía pidió a los viajeros consultar sus plataformas digitales para información actualizada antes de desplazarse. Mark Ilderton, director de servicios de ScotRail, explicó que la retirada temporal de trenes fue necesaria para proteger la seguridad ante condiciones extremas que superaron las previsiones meteorológicas.
En líneas principales, London North Eastern Railway retrasó el trayecto Londres King’s Cross-Inverness, que finalizó en Edimburgo por un árbol caído en Moy Loop, ofreciendo transporte por carretera a los viajeros.
El Met Office reportó vientos máximos de 96 mph en zonas bajas de Tiree y lluvia intensa de 84.6 mm en Cassley en 24 horas. Aunque las alertas amarillas de viento para el noreste y norte de Escocia expiraron el domingo al mediodía, el ambiente seguía ventoso y con lluvias dispersas.
En Irlanda, la tormenta se cobró una víctima fatal en un incidente vinculado al mal tiempo en Letterkenny, Condado de Donegal, el viernes.
Ferries cancelados, vuelos atrasados y carreteras cortadas por árboles derribados completaron el cuadro de caos en transportes que Amy provocó en la región. Network Rail informó de más de 420 incidentes en la red escocesa que sus equipos siguen atendiendo sin descanso.
SSEN también recordó que están organizando provisión de comidas calientes para personas afectadas y aconsejaron consultar información sobre compensaciones disponibles.
