La Agencia Tributaria Estatal de Ucrania informó que modelos ucranianos que ganaron dinero en OnlyFans entre 2020 y 2022 tienen una deuda fiscal de 384.7 millones de grivnas, cerca de 9.3 millones de dólares. La cifra representa impuestos no pagados por ingresos en la plataforma propiedad de Fenix International Ltd.
Esto ocurre a pesar de que la pornografía está prohibida en Ucrania desde 2009 bajo pena de hasta siete años de prisión, según el Código Penal. La producción, distribución y venta de material para adultos se considera delito, pero la Hacienda ucraniana sigue cobrado impuestos por estos ingresos.
Además, OnlyFans como empresa paga el impuesto al valor agregado (IVA) en Ucrania por consumo interno, lo que complica la situación fiscal para creadores locales.
En junio, la modelo ucraniana de OnlyFans Svetlana Dvórnikova presentó una petición para despenalizar la producción de contenido adulto, que fue revisada por el presidente Vladimir Zelenski y derivada a la Rada Suprema, el Parlamento ucraniano.
La paradoja jurídica enfrenta a modelos y autoridades: la actividad con riesgos penales genera ingresos sujetos a impuestos que hasta ahora permanecen impagados. La suma millonaria revela el reto que tiene Ucrania para regular esta industria en la sombra mientras se mantiene la prohibición oficial.
