Donald Trump confirmó este lunes que los abogados de P. Diddy, alias de Sean Combs, le pidieron una gracia presidencial tras la condena contra el productor y rapero en Nueva York.
El magnate del hip-hop fue sentenciado el viernes pasado a cuatro años y dos meses de prisión y una multa de 500.000 dólares por transportar personas para fines de prostitución. Una condena que marcó un punto clave en el caso que tenía apartado a Combs bajo prisión preventiva desde hace más de un año.
Consultado en la Casa Blanca, Trump afirmó que
“muchas personas me piden que los gracie” y que ha recibido solicitudes directas del entorno de Puff Daddy para su indulto
. Recordó además que meses atrás ya había comentado su intención de analizar el caso, incluso cuando el juicio estaba en curso.
“Si una persona es maltratada, que me quiera o no, eso no debería afectarme”, añadió Trump, destacando un raro tono de imparcialidad pese a la histórica rivalidad pública que mantuvo con Combs cuando entró en política.
Los abogados del músico, que lograron limpiar a su cliente de cargos más graves vinculados al tráfico sexual que podrían haber implicado cadena perpetua, anunciaron que apelarán la sentencia por considerarla “inconstitucional”.
El futuro del caso puede pasar nuevamente por la corte o la decisión presidencial. Por ahora, la solicitud de gracia será evaluada por Trump y su equipo, reavivando un escándalo que mantiene en vilo al mundo del hip-hop y la política estadounidense.
Las autoridades y los abogados de Sean Combs no han hecho comentarios públicos todavía sobre esta revelación.
