Peaky Blinders vuelve oficialmente con dos nuevas temporadas ambientadas en 1953, en un Birmingham que renace después de la Segunda Guerra Mundial. La serie británica, creada por Steven Knight y con Cillian Murphy como productor ejecutivo, traslada la acción a una ciudad en plena reconstrucción y enfrentando nuevas tensiones sociales y económicas.
Después de la sexta temporada, la historia se sumerge en la batalla por el control de proyectos de modernización urbana. Según la sinopsis oficial, se trata de una “competencia casi mítica” donde distintas facciones luchan por el futuro de Birmingham. La serie mantendrá la esencia original pero buscará mostrar el proceso de transformación y las amenazas que trae el progreso.
Cada temporada tendrá seis episodios de una hora, filmados en los Digbeth Loc Studios de Birmingham, lugar de origen de esta saga. La producción seguirá bajo la responsabilidad de Kudos y Garrison Drama, que trabajaron en temporadas anteriores y en la película “The Immortal Man”.
Por ahora no hay confirmación oficial del elenco, pero se espera que Murphy siga vinculado como productor ejecutivo. La gran incógnita será cómo introducir a una nueva generación Shelby, dejando atrás a Tommy y sus hermanos, para centrar la trama en sus herederos y un contexto político y social renovado.
Esta nueva etapa del show despierta altas expectativas entre los fanáticos, quienes ven en el regreso la posibilidad de actualizar la historia y mantener el éxito global. La colaboración entre Netflix y BBC promete consolidar su alcance internacional sin perder la identidad británica que definió a Peaky Blinders.
En resumen, Peaky Blinders apuesta a ampliar su legado en dos temporadas que prometen más drama, conflicto y la reconstrucción de una ciudad que vuelve a luchar por su destino.
