La crisis política en Francia suma un nuevo capítulo con la dura crítica de Marlène Schiappa a un ministro que acaba de dimitir. Tras la salida de Sébastien Lecornu, una pieza clave del macronismo, Schiappa rompió el silencio y lanzó un duro mensaje en Instagram.
En una serie de stories, la exsecretaria de Estado y ministra delegada no mencionó nombres, pero fue clara: “J’ai hésité entre rire et pleurer en entendant hier un ministre démissionnaire clamer sur un plateau de télé : ‘Non mais moi je n’ai jamais été macroniste !’ après l’avoir vu 7 ans se rouler par terre pour entrer dans un gouvernement, n’importe lequel”. La acusación es de incoherencia y falta de lealtad política, con un recordatorio directo: “Ayez au moins de la cohérence, si ce n’est par respect pour les citoyens, ne serait-ce que par respect pour vous-même.”
Este episodio se suma a la inestabilidad marcada en La República Francesa desde la remodelación gubernamental que se disipó en horas. Schiappa también tocó otro punto sensible: las polémicas indemnizaciones que algunos informes ubicaban como exorbitantes en un gabinete que apenas duró un día.
Para ella, las “indemnités de départ” son casi una fake news. Explica que aplican solo a quienes no son parlamentarios y que no tengan otro empleo en tres meses. Además, precisa que dichas indemnizaciones tampoco incluyen derecho al desempleo o pensiones especiales. En resumidas cuentas, asegura que prácticamente no afectan a nadie del nuevo equipo y solo a un par de ex miembros del gobierno dimitido.
“Certes ce n’est pas le SMIC. Mais sincèrement ça n’a rien à voir avec la manière démagogique dont la chose est présentée partout comme s’ils touchaient un chèque en partant. Ce n’est pas le cas,”
enfatizó Schiappa, argumentando que las acusaciones buscan atraer clics y fomentar el resentimiento social con datos sesgados.
La exministra insistió en que estas ayudas buscan permitir que personas sin recursos puedan acceder a cargos políticos, evitando que solo figuras acomodadas se beneficien del poder y abandonen sus cargos con grandes resarcimientos.
Este nuevo choque dentro del macronismo llega en un momento delicado, con varios miembros del gobierno bajo presión y un ambiente político que tiende a la fragmentación. La salida de Lecornu fue solo el último de una cadena de dimisiones que calienta el panorama para el Presidente Emmanuel Macron.
El debate sobre coherencia política, lealtades y financiación de cargos públicos sigue abierto en Francia, con figuras como Schiappa que no rehúyen confrontar la opinión pública en redes sociales y medios tradicionales.
