Dick Van Dyke se prepara para llegar a los 100 años, pero no sin antes bromear sobre la llegada de su gran fecha. Durante un evento en Los Ángeles este fin de semana, el legendario actor de 99 años dijo entre risas:
“Sería gracioso si no llego”
Van Dyke mantiene intacto su sentido del humor y su energía, que lo han acompañado a lo largo de una carrera de más de siete décadas. A su lado siempre está su esposa, Arlene Silver, con quien se casó en 2012 pese a la diferencia de edad de 46 años. El actor la definió como “lo único” que hizo bien en la vida y “su mejor decisión”.
El secreto de su longevidad, según el propio Van Dyke, es la constancia en el ejercicio. En enero reveló en el podcast Where Everybody Knows Your Name que sigue yendo al gimnasio tres veces por semana. El actor Ted Danson recordó haberlo visto entrenar en un gimnasio de Malibu bailando entre máquinas de pesas.
En abril, el músico Rick Springfield compartió una foto con Van Dyke en el gimnasio y destacó la energía del actor a sus 99 años, recordando que dio pasos de baile tras un intenso entrenamiento.
Sin embargo, la edad también le ha traído momentos de melancolía. En mayo, durante una sesión de preguntas y respuestas, habló sobre el “precio” de llegar tan lejos en la vida y la pérdida de amigos cercanos como Ed Asner, con quien planeaba hacer otro proyecto.
“Ha sobrevivido a todos. Esa es la maldición de vivir casi 100 años”,
dijo Silver en apoyo a su esposo.
Este diciembre, Van Dyke celebrará el centenario de su nacimiento recordado por su papel icónico en Mary Poppins y Chitty Chitty Bang Bang. A pesar de la edad, la estrella sigue activo y es un ejemplo de vitalidad para varias generaciones.
