Mollie, fintech neerlandesa con 20 años en el mercado, está marcando un nuevo ritmo en Francia tras solo seis años en el país. Su objetivo: simplificar los pagos para empresas desde pequeñas startups hasta grandes internacionales.
Con un mercado e-commerce francés estimado en 175.000 millones de euros para 2024 y un crecimiento anual del 10%, Mollie apuesta fuerte para ampliar su cuota. Según Adrien Dupuis, responsable de ventas en Francia, su plataforma ofrece acceso rápido – menos de 15 minutos para abrir cuenta – y más de 35 métodos de pago integrados en una única API.
“Nuestro ADN es la simplicidad: Apple Pay, Google Pay, Klarna y PayPal sin contratos separados ni múltiples integraciones”, explica Dupuis. Esta agilidad le ha permitido captar clientes variados, desde comercios locales nuevos hasta grupos internacionales como Maisons du Monde, que la utilizan para crecer en Europa.
La plataforma va más allá de lo técnico, conectando con más de 350 socios en e-commerce, contabilidad, logística y CRM. Esto reduce costes técnicos y evita complicaciones, adaptándose al ecosistema del cliente sin exigirle reorganizar su estructura.
En Francia, donde el pago con tarjeta representa el 75% de las transacciones, Mollie ha reforzado su oferta con sistemas avanzados de prevención de fraude que mejoran la experiencia del usuario y permiten evitar bloqueos en la doble autenticación, aumentando la tasa de aceptación de pagos.
Mollie también fue pionera en Europa al implementar Click to Pay de Visa y Mastercard, facilitando el pago recurrente online. Además, su alianza estratégica con Klarna permite ofrecer el pago fraccionado, clave en sectores con alto ticket, como moda o electrónica, aumentando así la conversión en ventas.
El paquete de soluciones se completa con Mollie Capital, que ofrece a los comerciantes anticipos de hasta 250.000 euros para financiar campañas o stock, y con un acuerdo con Qonto que simplifica la gestión financiera integrando cuentas y pagos desde el mismo panel.
Por primera vez, Mollie apuesta por el pago físico con terminales móviles 4G y tecnología “tap to pay” que convierte smartphones en puntos de venta, impulsando su estrategia omnicanal para unificar ventas online y tiendas físicas.
Expansión europea y visión a futuro
Mollie no se conforma con Francia. Tras consolidar presencia en Holanda, Alemania, Bélgica, Reino Unido y Francia, la fintech acelera su llegada a Italia, Portugal, Suecia y prepara lanzamientos en Polonia y Europa Central y del Sur.
“Queremos estar en toda Europa a medio plazo y acompañar a nuestros clientes con soluciones locales adaptadas”, asegura Dupuis.
Mollie destaca por escuchar a sus clientes: integra solo innovaciones que responden a demandas reales, evitando inversiones innecesarias. Con esta base, se posiciona como un socio clave para pequeñas y grandes empresas que buscan agilizar pagos y potenciar su desarrollo.
En un mercado francés saturado y dominado por bancos tradicionales, Mollie irrumpe con agilidad, tecnología e integración para transformar la experiencia de pago empresarial desde la sencillez.
