El asesinato del activista conservador Charlie Kirk dejó un vacío en la movilización del voto joven que podría definir las elecciones legislativas de 2026 en Estados Unidos. Según fuentes de Reuters, la Casa Blanca analiza seriamente involucrar al vicepresidente J.D. Vance para mantener y ampliar ese impulso.
Vance, de apenas 41 años y uno de los vicepresidentes más jóvenes en la historia de EU, tenía una relación cercana con Kirk, fundador de Turning Point USA, que ayudó a consolidar un bloque clave en el electorado juvenil, especialmente hombres, donde el expresidente Donald Trump logró avances en 2024. El equipo en la Casa Blanca ha tenido “conversaciones preliminares” para que Vance encabece una gira universitaria enfocada en reforzar el apoyo republicano entre jóvenes.
Andrew Kolvet, asesor principal y portavoz de Turning Point, destacó que Vance “sería perfecto” para esta tarea, aunque no confirmó diálogos formales para asignarle ese papel. Paralelamente, Tyler Bowyer, director de operaciones del grupo y cerebro de la estrategia en terreno, seguirá impulsando la base juvenil, con planes para mantener la pelea en estados clave como Pensilvania, Wisconsin y Arizona.
Fuentes consultadas por Reuters coinciden en que aunque el golpe de perder a Kirk es duro, su estructura y estrategia están preparadas para resistir e incluso fortalecerse, con nuevos líderes emergentes en la maquinaria conservadora.
La retención y expansión del voto joven es crucial para que el Partido Republicano mantenga la mayoría en el Congreso en 2026. La absorción del esfuerzo por parte de Vance marcaría un paso estratégico relevante, aprovechando su perfil generacional y conexiones previas con Kirk.
