Marine Le Pen, líder de la ultraderechista Agrupación Nacional, lanzó duras críticas este viernes contra las negociaciones encabezadas por el presidente Emmanuel Macron para nombrar un nuevo primer ministro en Francia.
Le Pen calificó el proceso que se desarrolla en el Elíseo como un “espectáculo patético” marcado por la exclusión de la ultraderecha y también del partido izquierdista La Francia Insumisa (LFI), que rehusó participar y calificó las reuniones de “pérdida de tiempo”.
“Espectáculo angustioso, desesperado y patético… La única solución es convocar elecciones”, aseguró Le Pen ante los medios franceses.
Jean-Luc Mélenchon, líder de LFI, se unió a esta crítica y también pidió elecciones anticipadas. El político calificó el esfuerzo de Macron para salvar su mandato como un intento inútil y fallido.
“¿Por qué salvar a Emmanuel Macron, un soldado perdido en sus aberraciones y en el naufragio de su mandato?”, afirmó Mélenchon.
Las tensiones vienen tras la reciente renuncia del primer ministro en funciones, Sébastian Lecornu, el lunes pasado. Lecornu admitió que “no se dan las condiciones para gobernar” en medio de unas negociaciones presupuestarias altamente conflictivas. Esta es la cuarta dimisión en apenas un año, después de las bajas de Gabriel Attal en septiembre, Michel Barnier en diciembre y François Bayrou el mes pasado.
El bloqueo político en Francia refleja una crisis profunda dentro de la mayoría presidencial que dificulta la formación de un gobierno estable. La exclusión de voces de ultraderecha y izquierda radical en las conversaciones incrementa la incertidumbre sobre el futuro político en Francia, con ambos líderes de oposición pidiendo elecciones inmediatas.
La presión para resolver esta parálisis será alta en los próximos días, ya que Francia entra en un periodo decisivo para definir su rumbo político, y la figura de Macron se encuentra cada vez más cuestionada dentro y fuera del Elíseo.
