Israel anunció la entrada en vigor del alto al fuego en Gaza tras un acuerdo con Hamas que dio inicio a la primera fase de un pacto para liberar rehenes y detener hostilidades tras dos años de guerra.
Decenas de miles de palestinos desplazados comenzaron su regreso a hogares destruidos, especialmente en la ciudad de Jan Yunis y el norte de Gaza, mientras la Defensa Civil retiraba cadáveres de las calles, reportando 63 cuerpos localizados solo desde que empezó la tregua.
El ejército israelí empezó a replegarse hacia la llamada “línea amarilla”, confirmada por el enviado presidencial estadounidense Steve Witkoff. El plazo para la liberación de los rehenes es de 72 horas, según lo pactado. Benjamin Netanyahu aseguró que espera celebrar “un día de alegría nacional” con el retorno de los cautivos, de los cuales 20 siguen vivos y 28 murieron, según reportes oficiales.
En medio de las negociaciones indirectas realizadas en Egipto, con la mediación adicional de Catar y Turquía, se acordó la liberación de 250 presos palestinos y otros 1.700 arrestados desde octubre, sin incluir figuras clave de la lucha armada.
El plan, basado en una propuesta del expresidente Donald Trump, quien anunció su viaje a la región, apunta a poner fin definitivo a un conflicto que comenzó con el ataque de Hamas el 7 de octubre de 2023 y que ha dejado al menos 1.219 muertos israelíes y más de 67.000 fallecidos en Gaza, según fuentes oficiales palestinas.
A pesar del avance en la tregua, el desarme de Hamas y la propuesta de Trump para una autoridad de transición en Gaza están rechazados por el movimiento islamista, advirtió Osama Hamdan, líder de Hamas.
La ONU denuncia un bloqueo israelí que agravó la crisis humanitaria, con episodios que calificó como “hambruna” en varias zonas del enclave, acusación que Israel niega categóricamente.
El regreso de los desplazados es un regreso a la devastación. “Solo rezo para que mi casa no haya sido destruida. Solo esperamos que la guerra termine de una vez por todas”, dijo Mohamed Mortaja, mientras caminaba hacia una ciudad en ruinas.
La tregua marca un nuevo capítulo en un conflicto que ha estremecido a Oriente Medio durante dos años y que Colombia, como miembro activo de la comunidad internacional, sigue con atención debido a sus implicaciones geopolíticas y humanitarias.
