Donald Trump, presidente de Estados Unidos, de 79 años, está en “excelente salud” y se aplicó un refuerzo de la vacuna contra el Covid-19, según el último informe médico divulgado este viernes tras un chequeo en el Hospital Militar Walter Reed, cerca de Washington.
Este es el segundo examen médico del expresidente republicano desde su regreso a la Casa Blanca en enero. El documento, firmado por su médico Sean Barbabella, asegura que Trump mantiene un “rendimiento cardiovascular, pulmonar, neurológico y físico muy bueno”. Además, destacan que su edad cardíaca es aproximadamente 14 años más joven que su edad real.
Las dudas sobre su estado de salud se reavivaron tras la publicación de imágenes que mostraban hematomas en su mano derecha. Desde la Casa Blanca explicaron que dichos moretones provienen de “apretón de manos frecuentes” y uso de aspirina como parte de su tratamiento cardiovascular estándar. Trump también sufre de insuficiencia venosa crónica, que le causa hinchazón en los tobillos, según fuentes oficiales.
El refuerzo de la vacuna contra el coronavirus se dio “de cara a un viaje internacional”, en un momento en que el ministro de Salud Robert Francis Kennedy Jr., conocido por sus posiciones escépticas sobre vacunas, restringió el acceso a vacunas Covid-19 dentro del gobierno.
Este chequeo rutinario confirma la versión oficial sobre la salud del expresidente, la cual se mantiene sólida a pesar de su avanzada edad, la mayor entre los presidentes estadounidenses en funciones. La Casa Blanca ya había difundido un informe similar en abril, descartando preocupaciones mayores.
Trump sigue siendo una figura bajo escrutinio constante a nivel internacional, donde cualquier signo de fragilidad médica genera especulaciones sobre su capacidad para futuros compromisos oficiales.
