España dio un paso firme hacia el Mundial 2026 tras imponerse por 2-0 a Georgia en Elche, en un partido marcado por las bajas y la falta de acierto ofensivo.
La Roja se presentó con un equipo próximo al ideal según las ausencias, con destacadas novedades como Yéremy Pino, Cubarsí y Ferran Torres, en lugar de Huijsen, Lamine Yamal y Nico Williams. El equipo dirigido por Luis de la Fuente controló el balón de principio a fin, encontrando resistencia en un equipo georgiano cerrado y bien plantado defensivamente bajo un planteamiento de tres centrales.
Mamardashvili, portero del Liverpool y exvalencianista, fue la principal barrera para evitar una goleada española. Detuvo un penalti a Ferran Torres y salvó varias oportunidades claras, especialmente en la primera parte, aunque no pudo frenar los goles de Yéremy Pino y Oyarzabal.
El gol inicial llegó en el minuto 24 tras una asistencia de Pedri y un remate fácil de Pino, que rompió una temporada irregular condicionada por lesiones. En la segunda mitad, la perseverancia española se tradujo en un potente disparo de falta desde el borde del área que Oyarzabal no perdonó, haciendo el 2-0 definitivo al minuto 64.
Georgia apostó por un sistema defensivo muy conservador y el regreso en el campo de su estrella Kvaratskhelia no fue suficiente para cambiar el rumbo del encuentro, quedando sin apenas llegadas claras.
Los cambios en la segunda parte también evidenciaron la profundidad de La Roja, con Luis de la Fuente apostando por caras como Marcos Llorente, Barrios y Borja Iglesias para dosificar esfuerzos pensando en el próximo partido clave contra Bulgaria en Valladolid.
España cierra así la primera vuelta de la fase de clasificación con pleno de puntos y acercándose cada vez más a la cita mundialista. Con un nivel defensivo sólido y buen control del juego, La Roja mantiene su condición de favorita en el grupo.
El duelo tuvo lugar en el Martínez Valero ante 28.661 espectadores y fue arbitrado por el lituano Manfredas Lukjancukas, que amonestó a Porro por la Roja.
