Kauli Vaast, campeón olímpico de surf en 2024, sigue consolidando su dominio en las olas más peligrosas del mundo. Este 5 de agosto, en el icónico spot de Teahupo’o (Tahití), Kauli lideró la maniobra para que su hermano menor, Naiki Vaast, de 18 años, clavara una ola monumental con casco de protección y una salida impecable. El riesgo fue tal que Kauli confesó haber temido por la vida de Naiki, pero el joven salió triunfante frente a la “bomba” del día.
Un año después de que Kauli lograra su oro en París, fue la hermana mediana, Aelan Vaast, de 20 años y campeona de Francia en 2024, quien se enfrentó también a las olas salvajes de Teahupo’o con igual control y estilo. Juntos forman los “Dévaastators”, una familia que respeta la poderosa ola para dominarla, anclados en una tradición polinésica espiritual llamada “mana”, aunque sin raíces de sangre local.
La historia de esta familia es poco común: su padre Gaël, francés de Berck-sur-Mer, y su madre Natou, de Nueva Caledonia, decidieron mudarse a Tahití para criar allí a sus hijos en contacto con el océano. Kauli, Aelan y Naiki crecieron en Vairao, junto al fondo coralino donde han surfeado desde los 12 años en el temido Teahupo’o.
El trío irrumpió recientemente en Hossegor para el Quiksilver Festival, donde Kauli fue invitado, Aelan compitió y Naiki disfrutó del ambiente. Aelan, que reside en el País Vasco desde hace cinco años, alterna sus competencias con sus estudios de comercio en Biarritz, consolidando su carrera profesional tanto en las olas como tras bambalinas.
Naiki, por otro lado, se ha desconectado de la competición formal. A sus 18 años, estudia también en la Kedge Business School en Bayona pero no tiene prisa por ser un surfista profesional. Prefiere buscar olas grandes en su isla y pasear en bote practicando la pesca con arpón a modo de pasión personal, lejos de la presión competitiva.
Kauli, de 23 años, busca ahora dar el salto definitivo a la élite del surf mundial: compite en las Challenger Series con la mira puesta en el Championship Tour y planea estar en Los Ángeles 2028, aunque reconoce que el tiempo apremia. Entrena con Joan Duru, antiguo competidor olímpico y exrival, consolidando una dupla que combina agresividad y calma para dominar el circuito.
Después de llevarse la plata en los World Surfing Games en El Salvador, y haberse equipado con la Legión de Honor francesa, Kauli mantiene su casa y su base en Vairao. La familia Vaast sigue enraizada en su pasión común por el océano y en el respeto a la ola que tanto admiran como desafían.
“Hay que respetar la ola para dominarla”, dice Kauli Vaast, la gran figura del surf francés
Próximamente, Aelan defenderá su título nacional en la costa landesa y buscará avanzar en la Challenger Series, mientras Naiki mantiene su particular apego a Tahití y su pasión por las olas gigantes.
