OpenAI acaba de lanzar una función que integra aplicaciones directamente dentro de ChatGPT. Usuarios pueden activar apps por nombre o recibir sugerencias automáticas según el contexto de la conversación, todo sin salir del chat.
Ejemplo: si pides a ChatGPT que cree una lista de canciones, la app de Spotify aparece en el chat y empieza a trabajar de inmediato. Lo mismo con apps como Canva para crear presentaciones, o Zillow para buscar inmuebles. La primera vez se debe autorizar el acceso a tus datos para transparencia.
Esta nueva capacidad transforma a ChatGPT en una plataforma interactiva y adaptativa, que va más allá de generar texto. Las aplicaciones responden a lenguaje natural y usan interfaces interactivas dentro de la conversación.
Para desarrolladores, OpenAI lanzó un SDK (kit de desarrollo) en versión preliminar. Esto abre la puerta a que más creadores diseñen apps que llegarán a más de 800 millones de usuarios en la plataforma. El SDK usa el Modelo de Protocolo de Contexto (MCP) y ya permite probar apps en modo de desarrollador.
En los próximos meses se podrá enviar apps para revisión y publicación, también habrá lineamientos para monetizarlas. Este movimiento apunta a un mercado enorme y dinámico dentro de ChatGPT.
Actualmente, las apps están disponibles para usuarios registrados en planes Free, Go, Plus y Pro, salvo en Europa (EEE), Suiza y Reino Unido. Compañías como Booking.com, Coursera, Figma y Expedia ya cuentan con apps integradas, disponibles en inglés y en sus regiones habituales.
OpenAI prepara la expansión de esta función a más mercados, incluyendo la Unión Europea, en los próximos meses. Por ahora, el foco es ofrecer una experiencia fluida que combine la conversación con la acción directa dentro del chat, haciendo a ChatGPT mucho más que un asistente de texto.
Este paso es clave en la evolución de la inteligencia artificial conversacional, que no solo responde preguntas sino que ejecuta tareas y conecta servicios en un solo lugar.
