El presidente Gustavo Petro volvió a proponer este lunes retomar los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), proceso paralizado desde hace meses por el recrudecimiento de la violencia en varias regiones del país.
Petro hizo público su llamado a través de su cuenta en la red social X, donde respondió directamente a Pablo Beltrán, comandante del ELN, con un mensaje claro:
“Pruebe la paz de Colombia. No se necesita destruir una ciudad entera y matar 70.000 personas para hacer un intercambio humanitario”
.
Esta reacción llega tras la reciente aparición de Beltrán en un video grabado en las selvas colombianas, divulgado en septiembre después de ocho meses sin comunicación del líder guerrillero. En su mensaje de 17 minutos, Beltrán planteó condiciones para destrabar el proceso de paz, exigiendo que el Gobierno respete los acuerdos marco firmados entre la guerrilla y las administraciones pasadas de Juan Manuel Santos (2016) y la actual de Petro (2023).
“El ELN va a respetar eso, va a cumplir eso y le pide al Estado que lo cumpla. Esa es la salida”,
afirmó Beltrán en el video.
La negociación quedó suspendida tras violentos enfrentamientos entre el ELN y el frente 33 en Catatumbo, pero los choques armados continúan expandiéndose también a territorios en Norte de Santander, Chocó y Arauca. Estos enfrentamientos han provocado desplazamientos forzados y afectan gravemente a las comunidades civiles.
Además del ELN, el presidente anunció avances en conversaciones paralelas con el Clan del Golfo, una de las organizaciones criminales más poderosas del país, con las cuales explora opciones de diálogo en Qatar.
Ambas iniciativas forman parte de la estrategia gubernamental de “paz total”, un plan integral para buscar la reducción de la violencia y la construcción de una paz duradera en Colombia.
La propuesta de Petro busca aprovechar la reciente señal del ELN para destrabar un proceso que se ha estancado desde que la violencia en territorios estratégicos aumentó. El reto es lograr que ambos bandos cumplan los compromisos previos y evitar que nuevos ataques sigan golpeando a la población civil.
