Marruecos impulsa una inversión privada histórica para consolidar su soberanía en energía y agua. La filial real Nareva, bajo la dirección de Aymane Taud, lidera una serie de proyectos estratégicos que suman 12,3 mil millones de euros, la mayor inversión privada en la historia del país.
El operador Taqa Morocco confirmó el acuerdo, que incluye desarrollos en solar, eólico, hidráulico y proyectos de desalación. Entre ellos destaca la ampliación de la planta solar Noor 1 en Ouarzazate, un símbolo de la apuesta verde de Marruecos.
El plan es ambicioso: pretende fortalecer la independencia energética y la gestión hídrica frente a la demanda creciente y retos climáticos. Esta ofensiva posiciona a Nareva como el líder nacional frente a grandes multinacionales del sector.
Fuentes oficiales destacan que estos proyectos no solo buscan aumentar la producción, sino también desarrollar tecnología local y atraer inversiones internacionales, acelerando la transición verde que Marruecos quiere encabezar en África y el Mediterráneo.
La inversión récord se distribuirá en contratos a largo plazo que cubrirán varias regiones del país y tecnologías integradas para asegurar electricidad y agua en un contexto donde los recursos son cada vez más estratégicos.
Con este impulso, Marruecos refuerza su objetivo de alcanzar autosuficiencia energética y disminuir su dependencia de combustibles fósiles, con un enfoque claro en energías renovables y soluciones de agua innovadoras.
La dirección de Nareva no ha descartado nuevas alianzas internacionales para potenciar sus instalaciones y exportar tecnología a mercados vecinos, lo que también podría abrir oportunidades para empresas francesas especializadas en energías limpias.
Este acuerdo marca un punto de inflexión para el reino, que apuesta fuerte por la revolución verde y una gestión sostenible de sus recursos naturales, con cifras y compromisos que superan cualquier precedente en el continente.
