Trabajadores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) realizaron este martes un paro nacional de brazos caídos para exigir mejores condiciones laborales y aumentos salariales. La protesta inició desde las 7:30 de la mañana en diversas sedes del país, incluido un bloqueo parcial en los carriles centrales de Paseo de la Reforma frente a la Torre del Caballito en Ciudad de México.
En promedio, empleados con licenciatura y maestría perciben apenas 13,000 pesos mensuales pese a jornadas de hasta 14 horas, sin pago de horas extras ni ajustes por inflación. Denuncian falta de insumos básicos como agua potable, jabón y papel higiénico, además de instalaciones deterioradas y problemas de plagas en oficinas.
El paro se suma a la reducción del personal del SAT, que bajó de 32,331 trabajadores en 2020 a 24,800 en junio de 2025, un recorte de más de 7,500 plazas, principalmente en áreas de enlace. Esto después de que Hacienda aplicara ajustes presupuestales por más de 321 mil millones de pesos al gasto programable.
Antonio Martínez Dagnino, jefe del SAT, y el secretario de Hacienda, Édgar Amador Zamora, destacaron la semana pasada un récord histórico en la recaudación, que superó la meta en 470 mil millones de pesos de enero a septiembre. Pero los trabajadores reclaman que esos resultados no se reflejan en sus condiciones laborales ni sueldos.
En la Ciudad de México, empleados bloquearon la avenida Marina Nacional y el Viaducto Río de la Piedad, afectando el tránsito en ambas direcciones y dejando varias oficinas cerradas en zonas como Oriente y Sur.
“Hay que pedir prestado, no nos alcanza con lo que ganamos”, relató una empleada del SAT en Bahía de Santa Bárbara, mientras que otro trabajador denunció amenazas y represalias contra quienes participan en la protesta.
La presidenta Claudia Sheinbaum minimizó el impacto y aseguró que el conflicto es llevado por pocos empleados y que las autoridades del SAT y la Secretaría del Trabajo están atendiendo el caso. Sin embargo, los manifestantes aseguran que si participas en el paro corren el riesgo de ser despedidos.
Usuarios afectados mostraron molestia por la interrupción, especialmente quienes tenían citas para trámites. “Esto me atrasará todo, pero se entiende la situación de los trabajadores”, dijo una contribuyente en las oficinas del SAT Oriente.
El SAT emitió un comunicado pasadas las 2 de la tarde asegurando que mantiene la atención normal en 155 de 162 sedes, y negó amenazas a empleados. Reiteró que hay diálogo abierto para resolver las demandas.
La protesta se da en un momento clave, justo cuando la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados comenzaba la discusión del Paquete Económico 2026, que impulsa la recaudación fiscal como principal fuente de ingresos del país.
Los empleados del SAT exigen que se elimine la austeridad aplicada desde el gobierno de AMLO, que en los hechos ha congelado salarios, retirado bonos y eliminado seguros, mientras incrementa la presión para alcanzar metas récord de recaudación con menos personal y recursos.
En las calles y oficinas queda claro el desgaste: recaudación histórica, pero sueldos miserables y condiciones por debajo de lo mínimo para quienes sostienen una de las principales fuentes de ingreso público en México.
