Nuevo León reporta su primer brote de gusano barrenador del ganado en Sabinas Hidalgo y la noticia ya provoca un golpe directo a las exportaciones hacia Estados Unidos.
Antonio Varela Flores, secretario de Desarrollo Rural en Nuevo León, confirmó el caso que activa las alarmas sanitarias y comerciales en la frontera norte. “Ya estábamos cerca para una reapertura de exportaciones, con esto definitivamente ya no, son malas noticias,” dijo el funcionario sobre la cancelación inmediata del comercio.
El brote representa un riesgo sanitario grave y obliga a reforzar las acciones de sanidad animal, sobre todo en estados limítrofes como Tamaulipas, que aún no registra casos pero es ruta de tránsito. La autoridad estatal adelantó que se intensificarán controles para evitar la propagación.
Mientras tanto, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) mantiene cerrada la frontera a la importación de ganado, bisontes y caballos procedentes de México, una medida que refleja la preocupación por la plaga y que afecta directamente el sector ganadero mexicano.
Las autoridades estadounidenses atribuyen el incremento del riesgo al movimiento de animales desde zonas afectadas en México y han pedido la aplicación estricta del Plan de Acción Conjunto para contener la plaga.
El brote en Nuevo León es particularmente delicado porque es el primer caso confirmado al norte del país y se encuentra cerca del cruce fronterizo con Estados Unidos, lo que complica aún más la situación para exportadores que ya veían un escenario optimista para reactivar sus envíos. Por ello, la suspensión se mantendrá tanto a corto como medio plazo.
El sector ganadero en la frontera vive hoy un duro revés que puede impactar en las cadenas de producción y comercio, mientras las autoridades federales deben emitir el comunicado oficial y poner en marcha los protocolos para mitigar la plaga.
