El Ministerio de Salud firmó este viernes la Resolución 2161 de 2025, que marca el inicio de una profunda reestructuración del sistema de salud en Colombia.
La norma obliga a las EPS a reorganizar sus operaciones por subregiones funcionales, en un plazo máximo de un año, para avanzar hacia un modelo Preventivo, Predictivo y Resolutivo que busca la territorialización del aseguramiento en salud.
El ministro Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez explicó que el objetivo es superar un sistema fragmentado y garantizar una atención continua mediante redes interconectadas por regiones y subregiones, con énfasis en zonas rurales y marginadas.
Las EPS, tanto del régimen contributivo como subsidiado, deberán actualizar su autorización de funcionamiento ante la Superintendencia Nacional de Salud, que incorporará las nuevas subregiones como ámbitos operativos. El número de EPS permitidas por zona será entre tres y cinco, salvo en territorios especiales donde sólo podrá operar una.
Además, las EPS tendrán que contratar al menos el 60% del gasto en salud con las Empresas Sociales del Estado (ESE) municipales, para impulsar la red pública, y limitar la integración vertical al 30% del gasto total.
Una vez actualizadas las autorizaciones, el Ministerio y la Adres redistribuirán a los usuarios entre las EPS receptoras dentro de cada subregión, buscando garantizar la continuidad en el aseguramiento y la atención médica. La asignación mantendrá integrados a los grupos familiares y distribuirá a pacientes con enfermedades de alto costo y mujeres gestantes de forma proporcional y aleatoria.
“Este modelo busca garantizar el derecho fundamental a la salud, con atención centrada en las personas, las familias y las comunidades”, dijo Jaramillo.
Las EPS receptoras deberán atender a los nuevos afiliados desde el primer día calendario luego de la entrega oficial. Los usuarios podrán ejercer libre escogencia y cambiarse a otra EPS dentro de la misma subregión 60 días después de la asignación inicial.
Las entidades que dejen de operar seguirán siendo responsables del aseguramiento y la prestación de servicios hasta un día antes de la transferencia oficial de afiliados.
Para garantizar la transición, la Superintendencia realizará un seguimiento periódico con foco territorial, especialmente en las EPS con mayores riesgos para cumplir con las nuevas normas.
La reestructuración promete un sistema de salud más integrado, con servicios más cercanos a las comunidades, calidad y continuidad efectiva en todo el país.
