La Ley Europea de Accesibilidad, vigente desde julio, obliga a que los servicios clave estén adaptados para más de 440 millones de europeos, incluidos casi 100 millones con discapacidad. Esto afecta directamente a España, país donde el acceso a emergencias, bancos y transporte sufrirá cambios inmediatos.
El número de emergencias 112 debe permitir comunicación por voz, texto y vídeo en tiempo real, desde cualquier lugar del país o Europa, facilitando la atención a personas con dificultades para comunicarse.
Los cajeros automáticos tendrán que integrar interfaces multisensoriales para ciegos o personas con baja visión, además de ajustarse a medidas de altura que favorezcan el uso a usuarios en silla de ruedas o con talla baja. También la banca online y los contratos asociados deberán ser accesibles sin barreras.
«Poder llamar al 112, sacar dinero o reservar un billete por internet sin obstáculos es una condición esencial para vivir con autonomía, seguridad y dignidad», aseguró Jesús Hernández-Galán, director de AccessibleEU.
En cuanto al transporte público, los operadores deben informar sobre accesibilidad de estaciones y servicios. Webs, apps y pantallas informativas deben cumplir los requisitos legales. Esto facilitará la movilidad para personas con discapacidad y la creciente población mayor – que se proyecta que llegue al 30% en 2050, frente al 20% actual, data de la Comisión Europea.
La ley también impone accesibilidad en dispositivos como ordenadores, smartphones, plataformas de comercio electrónico, televisores y sistemas audiovisuales. Además, obliga a formar al personal que atiende a personas con discapacidad.
Este cambio legislativo supone un paso importante para eliminar barreras y garantizar derechos en sectores clave para la vida cotidiana de millones en España y Europa. Desde ahora, la accesibilidad deja de ser opcional y será un requisito legal para servicios públicos y privados esenciales.
