Después de décadas de espera, los planes para construir un gigantesco embalse en el campo de Kent comienzan a tomar forma. La empresa South East Water (SEW) ha iniciado la primera fase de investigaciones geológicas en una gran parcela de farmland en Broad Oak, cerca de Canterbury.
Los trabajos consisten en excavaciones de prueba y análisis de muestras de suelo que marcarán el inicio preparatorio del proyecto estimado en £362 millones. Según la empresa, la construcción completa no arrancará hasta 2030, pero la infraestructura debería suministrar agua a viviendas y negocios en Canterbury, Whitstable y Herne Bay para mediados de la década.
El embalse abarcará unas 200 acres y almacenará hasta 5,126 millones de litros de agua, con capacidad para entregar 22 millones de litros diarios, el equivalente a 275,000 baños llenos cada día. SEW planea extraer agua cruda del río Great Stour, cercano a Monkton, para almacenarla y tratarla antes de distribuirla.
“Es un proyecto muy grande. En los próximos meses retiraremos la maquinaria tras la investigación del terreno. La construcción empezará alrededor de 2030 y se extenderá por cinco años,” explicó el director del proyecto, Ben McKellar.
SEW adquirió esta tierra en los años setenta, pero aplazó la iniciativa por años. McKellar advirtió que “ya es hora de construir” para asegurar el suministro y la resiliencia del sistema de agua en la región.
Además del embalse, el plan incluye la creación de espacios públicos: senderos, rutas ciclistas, un circuito de arte y zonas de picnic que convertirán la zona en un lugar para familias y visitantes.
La solicitud de permiso para la construcción está prevista para 2028. Hasta entonces, los trabajos se limitarán a estudios y encuestas. La obra final se extenderá por unos cinco años con un impacto esperado en el abastecimiento de agua crucial para el sureste de Inglaterra.
