Monterrey cerró la 33ª edición de la Feria Internacional del Libro con más de 360 mil asistentes, consolidándose como un punto clave para la literatura y la cultura en México.
El evento, organizado por el Tecnológico de Monterrey a través de su Escuela de Humanidades y Educación, reunió a 818 participantes entre autores, editores y promotores culturales en 595 actividades. Colombia fue el país invitado de honor, con 43 actividades que incluyeron literatura, música y cine, reforzando la relación cultural entre ambas naciones.
El Pabellón de la Niñez, creado para fomentar la lectura infantil, atrajo a más de 102 mil visitantes con talleres y cuentacuentos, convirtiéndose en uno de los espacios con mayor afluencia. Mientras tanto, el Programa Juvenil contó con la participación de 170 escuelas y 15 mil jóvenes, quienes participaron activamente en charlas y talleres.
Entre las novedades destacadas estuvo LuchaLibro Tec 2025, la competencia de escritura improvisada que logró captar la atención de la juventud mediante creatividad y talento en tiempo real.
El perfil académico se mantuvo sólido con la Cátedra Alfonso Reyes, que presentó conferencias y diálogos sobre literatura y pensamiento, manteniendo los auditorios a más del 80% de capacidad durante casi toda la feria.
Las ventas en editoriales y librerías también mostraron crecimiento, reflejo del interés y dinamismo de asistentes de todas las edades.
En la jornada final, figuras como Rosa Montero y Leila Guerriero discutieron el vínculo entre periodismo y narrativas literarias. Se presentaron además obras de Mario Mendoza, Diego Enrique Osorno, Lavinia Braniște, Miriam Reyes —ganadora del Premio Nacional de Poesía 2025— y Aura García-Junco.
La clausura destacó con un evento para jóvenes lectores a cargo de La Sociedad de las Pesadillas, que conectó lectura y narrativas digitales, demostrando la actualización constante del programa para las nuevas generaciones.
El invitado de honor para la siguiente edición del 2026 será anunciado próximamente.
