Blanca Suárez y Manu Ríos fueron los protagonistas absolutos en El Hormiguero durante la noche de ayer, donde no faltaron las risas, confesiones y complicidad. Los dos actores visitaron el programa para presentar su nueva serie en la que interpretan a sanitarios, y comentaron que se metieron tanto en sus roles que aprendieron a suturar.
Pablo Motos no dejó pasar la oportunidad y los puso a prueba en directo, desafiando sus habilidades con la aguja. La dinámica se tornó divertida y puso de manifiesto el compromiso de ambos con sus personajes.
Durante la entrevista, Motos preguntó a Manu Ríos sobre su aparición en una fiesta de Madonna, una experiencia que el actor calificó como “lo más surrealista” que ha vivido. El presentador y su compañera también compartieron anécdotas sobre eventos que mezclaron fiesta y tatuajes, lo que añadió una dosis extra de entretenimiento al programa.
Para rematar la velada, Trancas y Barrancas, las famosas hormigas del show, realizaron una sección donde pusieron a prueba las habilidades detectivescas en el amor de ambos invitados. El momento fue a la vez divertido y picante, dejando claro el buen ambiente que reinó durante toda la entrevista.
Blanca Suárez y Manu Ríos mostraron no solo su talento actoral, sino también su química fuera de pantalla, ganándose aplausos y dejando a la audiencia con ganas de más.
