MasOrange, la nueva teleco gigante resultante de la fusión entre MásMóvil y Orange España, cerró los primeros nueve meses de 2024 con una fuerte mejora en sus resultados financieros y operativos.
La compañía alcanzó una facturación de 5.664 millones de euros, un alza del 3,7% respecto al mismo periodo del año anterior, y su ebitda ajustado subió un 8%, hasta 2.195 millones de euros. MasOrange comenzó a operar como una sola empresa desde marzo de 2024, por lo que la comparación del primer trimestre se hace con resultados combinados previos de Orange y MásMóvil por separado.
Meinrad Spenger, CEO de MasOrange, destacó el aprovechamiento eficiente de la fusión, que ya ha generado 259 millones en sinergias sólo en lo que va de año. La empresa calcula llegar a 300 millones en ahorros para todo 2025 y proyecta 500 millones anuales a partir del cuarto año tras el cierre de la operación.
El grupo potenció su caja operativa en un 11%, alcanzando 1.407 millones de euros. Las inversiones desplegadas hasta septiembre llegaron a 861 millones, un 15% de los ingresos, destinados a ampliar redes 5G y fibra óptica (FTTH) y avanzar en transformación tecnológica con IA, servicios cloud, analítica y su propio stack IT.
La captación de clientes también fue notable: cerca de 500.000 nuevos clientes de valor, con más de 383.000 contratos móviles y 100.000 servicios de fibra óptica contratados en el último año.
El capital de MasOrange está dividido al 50% entre Orange y los fondos KKR, Cinven y Providence, dueños de MásMóvil. Este reparto se mantendrá como mínimo hasta abril de 2026, cuando los fondos podrán solicitar la salida a bolsa. Orange podría entonces recomprar parte o todo el 50% que no controla, y ya habrían comenzado las negociaciones para dicha venta.
Chrystel Heydemann, CEO de Orange, aseguró que “no hay prisa” para cerrar acuerdos y que estudian todas las opciones
Paralelamente, Orange junto con Bouygues e Iliad presentaron una oferta no vinculante de 17.000 millones de euros por la mayor parte de los activos de Altice en Francia, con interés en captar clientes y espectro. El proceso sigue abierto, con un diálogo constructivo pero sin garantías firmes de acuerdo.
Orange reportó entre enero y septiembre ingresos por 29.846 millones de euros, prácticamente sin variación, y un ebitdaal de 9.112 millones, un 2,9% más. La empresa mantiene previsiones de crecimiento del 3,5% en ebitdaal y un flujo de caja de telecomunicaciones en torno a 3.600 millones.
Finalmente, Orange confirmó un dividendo de 0,3 euros por acción para el 4 de diciembre y propone en junta un mínimo de 0,75 euros por título del ejercicio actual.
MasOrange acelera así su integración con sólidas cifras y flexibilidad para futuras reestructuraciones, mientras Orange amplía foco en mercado francés y sigue priorizando retorno a accionistas.
