La piña colada, uno de los cocteles más icónicos del Caribe, debe su fama a su sabor fresco, dulce y aroma tropical. Originaria de Puerto Rico, donde fue declarada bebida oficial en 1978, esta mezcla combina ron blanco, jugo de piña y crema de coco para lograr una textura cremosa y refrescante.
Preparar una piña colada es rápido y sencillo. Solo necesitas 60 ml de ron blanco, 90 ml de jugo de piña natural, 30 ml de crema de coco y hielo picado. La mezcla se licúa a máxima potencia hasta quedar homogénea y se sirve fría en vasos grandes o copas tipo huracán.
El proceso toma menos de 10 minutos desde el inicio hasta la decoración, que suele incluir una rodaja de piña y una cereza marrasquino. Para un mejor resultado, expertos recomiendan no escatimar en hielo y ajustar la crema de coco según el gusto personal.
Además, existen variantes sin alcohol y ajustes en las proporciones para quienes prefieren un trago menos dulce o más ligero. Nutrimentalmente, una porción aporta unas 230 calorías, con 23 gramos de hidratos y 7 gramos de grasa, principalmente saturada.
La piña colada debe disfrutarse al momento de prepararse. Conservarla más de 4 horas en nevera no es recomendable ya que el hielo se derrite, afectando la textura cremosa característica de este coctel tropical.
En Colombia, la popularidad de la piña colada crece con la temporada de calor y la apertura de bares que buscan ofrecer sabores caribeños auténticos. Esta receta simple puede replicarse en casa para quienes quieran un pedazo del Caribe sin salir del país.
































