Más de 150 vecinos de San Juan de la Rambla salieron esta domingo a la calle para exigir un acceso peatonal seguro en la autopista TF-5, después de que una joven de unos 20 años resultara herida al ser atropellada hace tres días en el barranco de Ruiz, dirección Icod de los Vinos.
La protesta se centró en la zona donde han ocurrido varios incidentes de tráfico y volvió a poner sobre la mesa una demanda que los residentes califican de urgente y justa: la creación de pasos de cebra, badenes, mejoras en la iluminación y señalización para garantizar el paso seguro entre la costa y el casco urbano.
“Cada día cruzar la carretera es jugarse la vida”, denunció una vecina durante la concentración.
Los manifestantes reclamaron directamente al Cabildo de Tenerife y al Ayuntamiento de San Juan de la Rambla que actúen sin más demoras. Esta no es la primera protesta; semanas atrás ya habían denunciado el abandono del litoral bajo el lema “Litoral = Abandono Total”, señalando el deterioro del mobiliario urbano, la falta de limpieza y la ausencia de parques infantiles adecuados.
Otra fuente de enfado es el cierre de la Oficina del Litoral, que lleva más de cuatro meses sin actividad, a pesar de que un decreto municipal obliga a visitas semanales para supervisar la zona. Los vecinos ven esta situación como una muestra más del abandono institucional que sufre la costa.
“Vivir junto al mar no puede seguir siendo sinónimo de olvido”, advirtieron los residentes, que aseguraron que continuarán las movilizaciones mientras no haya respuestas concretas.
Las autoridades locales todavía no han anunciado medidas específicas tras la manifestación. El punto crítico en la TF-5 sigue sin soluciones inmediatas, mientras el riesgo para los peatones permanece alto.


































