El presidente argentino Javier Milei viajó a Nueva York para negociar un salvavidas financiero con el gobierno de Donald Trump. La reunión, prevista para este martes en el marco de la Asamblea General de la ONU, tiene como eje principal la delicada situación económica de Argentina, que enfrenta una grave escasez de reservas monetarias.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, confirmó este lunes que están “listos para hacer lo necesario” y consideran a Argentina un “aliado de importancia sistémica en América Latina”. Entre las opciones sobre la mesa para estabilizar la economía resaltan la compra directa de bonos soberanos argentinos mediante el Fondo de Estabilización del Tesoro (ESF, por sus siglas en inglés) o un contrato de swap de divisas entre la Reserva Federal y el Banco Central argentino.
Argentina atraviesa semanas de fuerte presión cambiaria y alta incertidumbre financiera. Solo la semana pasada, el Banco Central vendió 1.100 millones de dólares para contener el salto del dólar, mientras se acumulan vencimientos de deuda de 4.400 millones en enero frente a acreedores privados. Según datos oficiales, las reservas brutas cerraron en 39.118 millones de dólares, pero los expertos alertan que las reservas netas son mucho menores.
Ante la urgencia, el gobierno de Milei anunció la suspensión temporal de los derechos de exportación sobre granos, carnes y derivados para incentivar la entrada de divisas, una medida que ayudó a calmar los nervios en los mercados financieros.
Además de la reunión con Trump, Milei se encontrará con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. El respaldo de Washington es clave, tras la ayuda que EEUU ya apoyó para el acuerdo prorrogado con el Fondo Monetario Internacional en abril, que hasta ahora desembolsó 14.000 millones de dólares a Argentina.
El FMI, principal acreedor de Argentina con una deuda que supera los 57.000 millones de dólares, también avala la intervención estadounidense. La directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, destacó este mismo lunes el compromiso vital de EEUU para ayudar a estabilizar la economía argentina.
El futuro económico de Argentina pende de la reunión en Nueva York y de la respuesta que obtenga para evitar un colapso mayor. Las elecciones legislativas del 26 de octubre y las dudas sobre el programa económico de Milei añaden presión a la delicada situación financiera del país suramericano.
