El Ayuntamiento de Madrid rechazó este martes la propuesta de Vox para dedicar una calle o plaza a Charlie Kirk, activista estadounidense asesinado en septiembre durante un acto en una universidad de Utah.
La iniciativa, defendida por la concejala de Vox Carla Toscano en el Pleno de Cibeles, fue tumbada tras la oposición conjunta del PP, PSOE y Más Madrid. Toscano alabó a Kirk por su “respeto al que no pensaba como él” y su “valentía”, pero los demás grupos municipales consideraron la propuesta fuera de lugar.
Andrea Levy, concejala del PP, criticó la propuesta señalando que “no es lógico” homenajear a alguien que “ni siquiera pisó Madrid”. Consideró que Vox “distrae” con debates poco aplicables a la ciudad.
Por su parte, Jorge Donaire, edil del PSOE, calificó las ideas de Charlie Kirk como “completamente abominables” y defendió que “ningún debate político puede justificar jamás un crimen”. Rechazó además que se utilice el homenaje para conmemorar una figura ideológica.
En réplica, Toscano insistió en que el acto no tenía carácter ideológico y acusó a otros grupos de promover un “totalitarismo” que no acepta la diversidad de pensamiento ni la expresión libre, señalando que Kirk encarna “valores eternos” como la defensa de la vida, la familia y la fe.
Finalmente, el PP propuso un acuerdo transaccional para modificar la petición original y limitarla únicamente a condenar el asesinato de Kirk, eliminando el bautizo de un espacio público. Esta alternativa logró el respaldo de PSOE, Más Madrid y PP, mientras Vox votó en contra.
El debate refleja la división política en Madrid sobre homenajear figuras extranjeras con perfiles polémicos y la estrategia de Vox para internacionalizar temáticas en la agenda local. Por ahora, la ciudad se niega a poner el nombre de Kirk en sus calles.


































