Laura Gallego Solís renunció esta semana a su corona de Señorita Antioquia tras una fuerte polémica por un video en el que lanzó comentarios violentos contra el presidente Gustavo Petro y el exalcalde de Medellín, Daniel Quintero.
Gallego publicó un video donde preguntaba: “En el desierto tenés una pistola con una bala, te sueltan a correr a Petro y a Daniel Quintero. ¿A quién le das la bala?” Luego agregó que el mandatario merecía “al menos un cachazo”. Sus palabras generaron rechazo inmediato y una ola de críticas en redes sociales y medios colombianos.
La reacción negativa forzó su renuncia formal al título, que envió a la Organización del Concurso Nacional de Belleza. En su carta, lejos de retractarse, denunció que sus opiniones políticas eran señaladas como incompatibles con su rol y afirmó que tanto Petro como Quintero la atacaron públicamente.
“Me niego a que una corona sea una mordaza para opinar sobre política”, sostuvo Gallego en su misiva.
La polémica expone el choque entre la libertad de expresión y la responsabilidad pública que se espera de figuras conocidas, especialmente en el entorno político polarizado de Colombia. La organización del concurso aún no se ha pronunciado oficialmente sobre posibles sanciones o cambios en sus normas.
Hasta ahora, ni Petro ni Quintero respondieron directamente a la renuncia, pero el debate sigue abierto en redes sobre los límites del discurso público y la violencia verbal en la política.


































