Benjamin Abittan, director general de Châteauform’, aseguró que el bienestar en el trabajo es un verdadero motor económico para las empresas. Esta compañía, que en 30 años se ha convertido en el líder europeo de seminarios para empresas “como en casa”, basa su éxito en fomentar la convivialidad para mejorar el rendimiento.
La aventura de Châteauform’ empezó vinculada a la historia empresarial de sus padres, quienes emprendieron varias compañías como Photoservice, Grand Optical y Générale d’Optique, poniendo siempre la calidad de servicio en el centro. En aquel momento, estos grupos necesitaban una “universidad empresarial” que compartiera sus valores. Fue entonces cuando Jacques Horovitz, experto en cultura de servicio, criticó los espacios fríos y impersonales donde se formaban los equipos.
De esa necesidad surgió la idea de crear lugares cálidos y acogedores para la formación y los seminarios de empresa, que hoy definen la oferta de Châteauform’. “El entorno impacta directamente la motivación y el rendimiento”, explicó Abittan.
Este modelo ha posicionado a Châteauform’ como referencia en Europa, ofreciendo espacios donde la productividad convive con un ambiente que recuerda al hogar, una fórmula que, según su CEO, debe ser adoptada por más compañías si quieren sobrevivir y crecer.
En un contexto donde el bienestar laboral se torna prioritario para evitar la fuga de talentos y mejorar resultados, Châteauform’ se presenta como un ejemplo del impacto económico positivo que tienen estos enfoques. La empresa no ha publicado cifras recientes, pero su expansión y consolidación hablan por sí mismas.


































