En lo que va del 2025, 211 femicidios y transfemicidios fueron registrados en Argentina, según el Observatorio Mumalá “Mujeres, Disidencias, Derechos”. Sólo en octubre hubo 29 asesinatos vinculados a violencia de género, con un marcado aumento de casos relacionados al narcotráfico y crimen organizado.
Este dato desmiente las afirmaciones de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien aseguró que los femicidios bajaron durante la gestión de Javier Milei y culpó a los movimientos feministas por la supuesta escalada. Desde Mumalá respondieron con dureza:
“Los femicidios no bajaron, la crueldad sigue en aumento”
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Entre los casos que conmocionaron al país están el triple femicidio narco en Florencio Varela —con víctimas como Lara Gutiérrez, Brenda Del Castillo y Morena Verdi—, el asesinato de Luna Giardina y su exsuegra en Córdoba, y el de Daiana Mendieta en Entre Ríos. En todos predominan agresores del círculo íntimo: el 83% de los femicidios son cometidos por parejas, ex parejas o familiares cercanos.
Además, 855 intentos de femicidio fueron detectados en los primeros diez meses del año. La provincia de Buenos Aires es la más afectada con 97 casos y 4 más en la Ciudad Autónoma. Le siguen Santa Fe (24), Misiones y Córdoba (13 cada una), y otras provincias con cifras menores pero constantes.
Mumalá señala un aumento del uso de armas de fuego, vinculando este fenómeno con la eliminación por decreto de la Agencia de Control de Armas. La norma presidencial flexibilizó el acceso a armas semiautomáticas, bajó la edad mínima para obtenerlas y suspendió el Plan Nacional de Entrega Voluntaria de Armas.
También alertan sobre un aumento en la crueldad de los ataques y formas de ocultar los crímenes, incluyendo tortura previa y descarte de cuerpos, cuya tasa pasó del 12% al 17% respecto a meses anteriores.
Un dato preocupante es que solo un 14% de las víctimas había denunciado a sus agresores y apenas el 28% contaba con botón antipánico. El colectivo feminista interpretó esta baja denuncia como un impacto directo de la eliminación de políticas públicas contra la violencia machista y la postura negacionista oficial.
Finalmente, Mumalá demandó declarar la Emergencia en Violencias de Género y reinstaurar los programas de atención, sensibilización y acompañamiento integral para frenar la escalada de muertes en el país.


































