El activista de derechos humanos Danijel Kalezić presentó dos denuncias ante el Defensor del Pueblo de Montenegro contra las empresas Fabrica MNE y Etno selo Montenegro – Restoran Mayka por publicaciones en redes sociales que calificó como un claro discurso de odio y discriminación étnica.
El detonante fueron unos mensajes del 27 de octubre de 2025 en los que ambos restaurantes anunciaron públicamente un boicot a la empresa de reparto Glovo. Según sus publicaciones, rechazan que “migrantes” o “ciudadanos turcos” entreguen su comida, vinculando a estas personas con “hechos desagradables” ocurridos en Podgorica, la capital.
Kalezić advirtió que estos mensajes no solo son inmorales sino que violan directamente la Constitución y la ley contra la discriminación, al promover la exclusión de una etnia entera del ámbito público y laboral. Según él, estas expresiones normalizan la idea de que tener contacto con personas de cierta nacionalidad representa una amenaza, lo que es el núcleo de la deshumanización y segregación.
“Estas expresiones crean un clima de miedo, inseguridad y hostilidad hacia personas de origen extranjero, especialmente cuando en Montenegro se incrementa el discurso de odio contra ciudadanos turcos,” dijo Kalezić.
El activista destacó que esta no es la primera vez que entidades como Etno selo Montenegro usan las redes para difundir intolerancia, recordando que en 2020 publicaron mensajes contra la comunidad LGBTIQ tras la aprobación de la ley de sociedad de convivencia.
Kalezić denunció además la lentitud institucional para actuar frente a la propagación del odio y la discriminación, y subrayó que los mensajes que dividen por origen, religión, raza o preferencia sexual deben ser sancionados sin demora.


































