Montpellier vivió un control rutinario que terminó en una investigación judicial. Pasada la medianoche del 28 de octubre, agentes de la Bac detuvieron un vehículo en la plaza Rosa Parks, zona Montasinos. El conductor, un hombre de 31 años originario de Montpellier, llamó la atención por circular a alta velocidad tras salir de un punto conocido por la policía por tráfico de drogas.
Durante la inspección, los agentes hallaron un gramo de marihuana y menos de un gramo de cocaína. El detenido aseguró que esas sustancias eran para consumo personal. Lo que complicó su versión fue el hallazgo de billetes repartidos en el interior del automóvil por un total aproximado de 4800 euros en efectivo, en cortes de 10, 20 y 50 euros.
El hombre se mostró confuso sobre el origen del dinero y finalmente dijo que planeaba comprar un vehículo con ese dinero. Sin embargo, la situación empeoró cuando los policías encontraron varios empaques de protoxido de nitrógeno —sustancia usada también como droga recreativa— y cigarrillos. Primero admitió que vendía estos productos, pero luego se retractó afirmando que el dinero y los artículos eran fruto de sus ahorros.
El control se volvió aún más serio con el descubrimiento de múltiples tarjetas bancarias a nombre de terceros. El hombre dijo desconocer a quién pertenecían estas tarjetas. La policía solicitó acceso a su teléfono móvil para verificar información, pero el detenido se negó a dar el código de desbloqueo, cometiendo así una infracción penal.
El conductor fue detenido y está en custodia policial. Fue citado para declarar ante el tribunal judicial el próximo 23 de febrero de 2026. Enfrenta cargos por uso de sustancias estupefacientes, posible blanqueo de dinero y negativa a entregar el código del teléfono.
Este arresto subraya la vigilancia constante en zonas conflictivas de Montpellier y el esfuerzo de las autoridades para desmantelar redes relacionadas con drogas y delitos conexos.

































