Jesús Abraham López Gómez fue condenado a 16 años y 9 meses de prisión por los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas, tras aceptar responsabilidad en el asesinato de Gladys Daniela Cañas González, ocurrido el 21 de octubre de 2024 en el barrio El Progreso, Cúcuta.
López Gómez es el segundo implicado en este caso. Antes fue capturado y condenado Brayan José Díaz Garay, conocido como alias Wicho, quien recibió 17 años y 6 meses de cárcel tras un preacuerdo con la Fiscalía. Díaz Garay, de 19 años, planificó y ejecutó el atentado contra la víctima en plena vía pública.
Gladys, de 27 años, se movilizaba en motocicleta cuando fue seguida por Díaz Garay. Cuando se detuvo frente a una panadería, éste le disparó directamente al rostro, causándole la muerte inmediata con un solo disparo al ojo izquierdo.
La investigación de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) fue clave para recopilar testimonios y pruebas que llevaron a la captura y judicialización de los sospechosos. Díaz Garay fue detenido el 20 de noviembre de 2024, y López Gómez, uno de los criminales más buscados por la Policía Metropolitana de Cúcuta, fue capturado el 10 de junio de ese mismo año con un arma con silenciador.
El comandante entonces de Mecuc, brigadier general William Quintero, confirmó que López Gómez estaba vinculado con el homicidio. A pesar de no aceptar los cargos durante el proceso, la Fiscalía logró que fuera condenado.
Ambos delincuentes están vinculados a la estructura criminal Familia P, liderada por Ever Carreño Corredor, alias Porras, quien sería el autor intelectual del asesinato motivado por disputas territoriales relacionadas con el microtráfico.
En los bolsillos de la víctima fueron encontradas diez pequeñas bolsas con una sustancia blanca, presuntamente estupefacientes, lo que conecta el crimen con el negocio ilegal en la zona.
Gracias a cámaras de seguridad y un trabajo conjunto de inteligencia, las autoridades reconstruyeron los hechos y aseguraron a los responsables, que ahora cumplen condena.
