Newcastle United encajó un duro 3-1 en el London Stadium, donde West Ham aprovechó cada fallo para sentenciar el encuentro.
El técnico Eddie Howe vio cómo su equipo sufre otra derrota en Premier League, minando la confianza tras un inicio complicado de temporada. Los Hammers de Nuno Espirito Santo dominaron el partido y celebraron con entusiasmo en el vestuario, un contraste que refleja el momento preocupante de Newcastle.
El marcador no deja dudas: West Ham fue efectivo y letal en ataque, mientras que Newcastle encontró pocas vías para crear peligro real. Este resultado empeora la posición de Howe, cuya plantilla parece no encontrar respuesta tras varias jornadas sin sumar puntos clave.
Los aficionados del equipo del noreste de Inglaterra miran con preocupación cómo la diferencia entre ambos equipos crece cada partido. Para West Ham, la victoria impulsa la moral tras un arranque irregular, y para Newcastle, la alarma suena con fuerza ante una temporada que se presenta más dura de lo esperado.
La próxima jornada será clave para Howe y su plantilla, que necesitan un cambio urgente para evitar caer en zona de descenso y disipar dudas sobre su proyecto.


































