La alcaldesa de Barrios Unidos, Andrea Melissa Morales, denunció públicamente amenazas e intimidaciones recibidas del dueño del Before Club, Andrés Solano Bautista, pareja de la representante a la Cámara María del Mar Pizarro.
La Fiscalía General de la Nación abrió una investigación criminal por el delito de amenaza tras la denuncia que hizo Morales. El caso no está relacionado con la reciente muerte del estudiante de Los Andes, Jaime Esteban Moreno, quien salió de la misma discoteca antes de ser atacado mortalmente la madrugada del 1 de noviembre.
Según la denuncia, los hechos que motivan la querella ocurrieron el pasado 20 de junio, durante un evento masivo en el parque La Araña, barrio San Felipe. Más de 4.000 personas se reunieron para celebrar la aprobación de la reforma laboral, y Morales ejerció su función al exigir el cumplimiento de normas de seguridad y control de aforo en el evento.
Al finalizar el evento, Morales denunció que fue insultada y hostigada por miembros de la organización. Además, Andrés Solano publicó en Instagram fotos y videos de la confrontación, según la alcaldesa, desinformando y promoviendo “la rebelión contra el gobierno local”, lo que desencadenó una serie de mensajes intimidatorios hacia ella.
“Desde ese 21 de junio he recibido mensajes directos por Instagram con insultos, señalamientos y amenazas que han afectado mi salud mental”, dijo Morales, quien añadió que ha presentado cuadros de ansiedad, insomnio y temor constante. “Es la primera vez que alguien manifiesta abiertamente que quiere ver mi muerte o atentar contra mi vida”.
La alcaldesa explicó que, por la naturaleza de su cargo, no puede aislarse y que el acoso ha sido muy difícil de soportar. Mientras tanto, la Fiscalía sigue los pasos legales contra Solano por estas amenazas.
Contexto por homicidio en Before Club
La denuncia llega días después del homicidio de Jaime Esteban Moreno, estudiante de la Universidad de Los Andes, brutalmente golpeado tras salir de una fiesta en Before Club. Solano apareció en un video público lamentando la muerte y se puso a disposición de las autoridades. Actualmente, solo Juan Carlos Suárez Ortiz, otro estudiante presente en la fiesta, está detenido y enfrenta cargos por homicidio culposo.
El caso sigue abierto y genera un debate sobre seguridad en eventos masivos y la responsabilidad de los organizadores y establecimientos nocturnos en Bogotá.

































