La operación militar “Sinergia 25” concluyó esta semana tras una activación del Mando Operativo Terrestre (MOT) en Melilla y sus alrededores entre el 15 y 21 de septiembre. En esta iniciativa participaron unidades del Tercio “Gran Capitán” 1º de La Legión y del Regimiento de Ingenieros nº 8 desplegadas en puntos clave para reforzar la vigilancia y respuesta rápida.
Durante los siete días, una sección del Tercio “Gran Capitán” fue trasladada por vía marítima al archipiélago de Chafarinas, en la costa africana, para reforzar el destacamento en las islas Isabel II, Congreso y Rey. El control de estos enclaves es esencial para la defensa territorial y la soberanía española en esta zona sensible.
Paralelamente, el Regimiento de Ingenieros nº 8 ejecutó patrullas terrestres dentro de Melilla bajo la modalidad de Presencia No Permanente (PNP), lo que permitió realizar reconocimientos y familiarizarse con el terreno al tiempo que se coordinaban con actividades aéreas y navales. Este despliegue táctico integra ejercicios regulares para mantener la capacidad operativa en situaciones reales.
“Sinergia 25” se llevó a cabo de modo simultáneo con otras operaciones estratégicas, como “Eagle Eye 25-03” en Canarias y “Joint Shield 3-25” en el Estrecho de Gibraltar, movilizando en total a más de 1.000 efectivos de distintas ramas militares. Esta coordinación intermandos busca optimizar recursos y proyectar una presencia disuasoria constante en puntos sensibles de España y territorios extra peninsulares.
El Ministerio de Defensa sostiene que estos ejercicios son fundamentales para detectar posibles amenazas con antelación y garantizar una capacidad de respuesta inmediata frente a cualquier crisis, especialmente en zonas fronterizas y de soberanía delicada.
“Es un gran orgullo representar a las Fuerzas Armadas y poder contribuir a la defensa de España en estas zonas tan especiales para todos nosotros”, afirmó un soldado participante.
Con el cierre de “Sinergia 25”, las Fuerzas Armadas reafirman su compromiso con la seguridad y soberanía nacional, reforzando Melilla como punto estratégico clave dentro del dispositivo de defensa integral que protege territorio peninsular y no peninsular.
