Un alarmante 43% de los trabajadores en México planean renunciar a su empleo debido a la desmotivación laboral, revelan datos del informe Panorama Laboral en México 2025 de Pluxee.
La desmotivación no surge de la nada, sino que se desgasta lentamente ante ambientes tóxicos, falta de reconocimiento, escasas oportunidades de crecimiento, mala comunicación, liderazgo deficiente y condiciones de compensación injustas, advierte el análisis de Forbes México.
Un estudio global de Gallup reporta que solo el 21% de los empleados en el mundo están comprometidos con su trabajo, la cifra más baja desde 2021, lo que implica pérdidas económicas por $438,000 millones de dólares en productividad.
El ambiente tóxico es uno de los problemas más peligrosos. Según MIT Sloan Management Review, la falta de respeto dentro del equipo puede arruinar la cultura laboral en cuestión de semanas, y basta con una sola persona para contaminar todo el clima.
Además, la falta de reconocimiento impulsa la desconexión. Trabajadores que alcanzan metas y no reciben ni un “gracias” terminan perdiendo el interés y la confianza en sus líderes.
La rutina y la falta de desarrollo profesional también hieren la motivación. El estancamiento prolongado sin nuevos retos ni crecimiento lleva al burnout y aumenta la rotación. Cuando los líderes no confían en los empleados y asignan tareas sin sentido, el efecto es peor.
La comunicación deficiente, especialmente desde mandos altos, fomenta inseguridad y rupturas en la confianza. Un empleado que no se siente escuchado ni valorado desconecta rápido.
Por otro lado, el liderazgo autoritario ahoga la iniciativa; la microgestión crea frustración y apatía. Y un liderazgo débil, que evita tomar decisiones en crisis, pierde rápidamente el respeto y la motivación del equipo.
Finalmente, las expectativas económicas incumplidas agravan el problema. Aunque el “salario emocional” importa, un pago bajo o injusto termina por desmotivar.
Teresa M. Amabile y Steven J. Kramer, expertos en psicología laboral, remarcan que reconocer los “pequeños logros” diarios es clave para mantener la motivación y la creatividad. Celebrar avances, por mínimos que sean, ayuda a que los empleados se sientan valorados y comprometidos.
La coach en liderazgo Nora Taboada insiste que evitar estos “asesinos” es vital para crear equipos productivos y ambientes laborales saludables. En el actual contexto mexicano, donde casi la mitad busca otro empleo, las empresas enfrentan un reto urgente para revertir esta tendencia.


































