El Concours général agricole, la veterana competición estatal que desde 1870 premia la excelencia de los productos y vinos franceses, lanzó oficialmente hoy las inscripciones para su edición 2026.
Los productores, vignerones, artesanos y criadores interesados tienen plazo para registrarse del 5 de noviembre de 2025 al 9 de enero de 2026. La competencia se llevará a cabo del 21 de febrero al 1 de marzo de 2026.
Con más de 22,000 productos inscritos y más de 5,300 medallas otorgadas en 2025, incluido un récord de 3,361 vinos y 1,982 productos, el evento sigue siendo un pilar de reconocimiento nacional e internacional para el sector agroalimentario francés.
Participar no es sólo un honor, sino una estrategia para obtener visibilidad masiva en medios, ferias, y canales de distribución, además de abrir puertas a mercados exteriores y nuevos compradores.
Las inscripciones se realizan exclusivamente en línea a través del sitio oficial del Concours général agricole. Los productos deben cumplir criterios estrictos de calidad y trazabilidad, y provenir de la agricultura francesa.
Para los vinos, el proceso de inscripción es ligeramente diferente y abarca todas las regiones vitícolas del país: Alsacia, Beaujolais, Burdeos, Borgoña, Champagne, Córcega, Jura, Languedoc-Rosellón, Lorena, Provenza, Saboya, Suroeste, Valle del Loira y Valle del Ródano.
Una novedad importante para 2026 es la incorporación del concurso de Boulangerie-Pain de Campagne, que celebrará la tradición y calidad del pan artesanal francés en pie de igualdad con las otras 21 familias de productos, que incluyen quesos, charcutería, mieles, aceites y especias.
Además, se abre la posibilidad de integrarse como miembro del jurado, ofreciendo una plataforma para valorar y destacar el saber hacer del campo francés.
La convocatoria reafirma la vitalidad y el apego del consumidor francés por los productos del terroir y aquellos con origen en explotaciones a escala humana.
Las cifras del último concurso evidencian que el reconocimiento del Concours général agricole sigue siendo un elemento clave para el desarrollo y prestigio de los productos nacionales en un mercado competitivo.


































