La policía de Seine-et-Marne arrestó el pasado 7 de octubre a dos adolescentes de 15 y 16 años tras descubrirlos responsables de 18 robos en viviendas cercanas a estaciones de tren. Los jóvenes, originarios de La Mée-sur-Seine, actuaron en varios municipios de la región llevándose decenas de miles de euros en objetos de lujo.
Los investigadores comenzaron a seguir la pista al mayor de los dos tras encontrar objetos robados en las zonas comunes de su domicilio. Lo que sentenció la investigación fueron las fotos y vídeos que mostraban a ambos posando con los botines. Las imágenes se guardaban en la nube asociada a un teléfono móvil también robado, lo que facilitó la identificación.
El joven de 16 años, con antecedentes por hurto, fue condenado el 6 de noviembre a 18 meses de cárcel, 12 de ellos en suspensión condicional, además de un seguimiento psicológico, escolarización obligatoria, indemnización a las víctimas y la prohibición de contactar con su cómplice.
Por su parte, el menor de 15 años queda bajo control judicial con medidas estrictas como el cumplimiento de escolaridad, toque de queda y la prohibición de comunicarse con el otro acusado. Su juicio quedó aplazado para mayo de 2026 en el tribunal para menores de Melun.
El caso destapó una modalidad de robos coordinados aprovechando la proximidad a estaciones de tren para desplazarse rápidamente y actuar en viviendas con poca protección. La confianza y orgullo de los adolescentes al ostentar sus botines en fotos les terminó causando la caída.


































