Esta semana el tribunal judicial de Nanterre aplazó para el 18 de noviembre su decisión sobre la polémica con las aguas Perrier de Nestlé. La asociación de consumidores UFC-Que Choisir lleva meses exigiendo la prohibición de la venta y el retiro de estas aguas del mercado francés, acusando a la marca de incumplir la normativa sobre aguas minerales naturales.
El caso llegó a audiencia esta mañana en un procedimiento de urgencia. El tribunal no dictó fallo inmediato y dejará la resolución para dentro de ocho semanas. La demanda reclama que se suspenda la comercialización de Perrier porque las aguas estarían siendo sometidas a tratamientos de microfiltración que no cumplen con los criterios legales. La ley exige que un agua mineral natural sea pura en su origen y no reciba tratamientos, pero Nestlé aplicaría filtros ilegales que alteran esta pureza.
Según la UFC-Que Choisir, Nestlé modificaría la microfiltración para usar filtros de 0,45 micras en lugar de los anteriores de 0,2 micras, lo que permitiría el paso de más agentes patógenos. Esta práctica implica un “riesgo real para la salud”, aseguró el abogado de la asociación, Alexis Marchetto, recordando que en la fuente de Vergeze, en el Gard, se detectó contaminación en pozos cercanos.
“Estamos ante un operador económico que fraude sobre la calidad de su producto y pone en riesgo a los consumidores”
La responsable jurídica de UFC-Que Choisir, Magali Buttard, subrayó la doble problemática: incumplimiento legal y aumento potencial del riesgo sanitario debido a la filtración menos rigurosa. Por eso exigen la retirada inmediata de todas las botellas Perrier ya vendidas, prohibición de su venta y el fin del uso engañoso de la etiqueta “agua mineral natural”.
Por su parte, Nestlé Waters rechazó en la audiencia todas las acusaciones. Su portavoz insistió que “nunca hubo riesgo sanitario” en su agua mineral natural Perrier y que distintas autoridades, incluida la prefectura del Gard, han reiterado la seguridad del producto.
La batalla legal continuará hasta el 18 de noviembre. Esa fecha marcará un antes y un después para las icónicas botellas verdes y azules de Perrier, que podrían enfrentarse a una suspensión provisional de venta mientras se resuelve la cuestión de fondo.
Además del enfrentamiento con Nestlé, UFC-Que Choisir ha presentado denuncias contra las autoridades públicas, entre ellas la Agencia Regional de Salud de Occitanie, implicadas en la supervisión del caso.
Este asunto tiene repercusión directa para millones de consumidores en Francia, que esperan una resolución rápida que asegure la calidad y seguridad del agua que compran. Por ahora, la incertidumbre pesa sobre una de las marcas más emblemáticas del mercado nacional.
