La Comic Con de Málaga arranca con largas colas en la zona gastronómica donde se venden hamburguesas a 17 euros y pizzas a 16 euros. Desde apertura a las 10 de la mañana, cientos esperaron bajo el sol para pedir comida y bebida, lo que ha generado múltiples quejas por falta de sombra y fuentes para beber agua.
La oferta culinaria incluye ensaladas a 12 euros, pokés y arroces a 20 euros, perritos calientes a 15 euros y dulces por unos 4 euros. Las bebidas varían desde café y refrescos por 3,15 euros, cervezas a 4,15 euros y copas de vino a 3,75 euros. También está disponible un ‘pasaporte foodie’ de 50 euros para pedir un plato y bebida diaria durante el evento.
Usuarios como Paula denunciaron la espera “a pleno sol” y pidieron a la organización la instalación de carpas:
“Hemos tardado más de media hora, ha sido una espera muy larga, deberían poner carpas aquí”
El problema se agrava con la escasez de fuentes de agua. Mario, uno de los asistentes, comentó a la espera de rellenar su botella:
“La gente se trae tres botellas y el caudal es muy bajo, es normal que haya colas inmensas”
La gastronomía se ubica en el parking del Fycma, transformado en el ‘Village’, un espacio al aire libre con cientos de mesas y sillas bajo grandes carpas, aunque la espera para acceder a los snacks y comida sigue siendo significativa.
Más allá de la comida, la convención ofrece más de 300 horas de contenido con paneles, exposiciones, cosplays y encuentros con artistas tanto en el espacio exterior como en el interior. Destacan el Hall M y tres auditorios con capacidad entre 200 y 900 personas para charlas y presentaciones.
A pesar de la programación variada y las novedades en cómic, videojuegos y cosplay, la atención alimentaria es por ahora motivo de queja en esta primera jornada del evento, un punto a superar para mejorar la experiencia de miles de visitantes.
