El Grupo Volkswagen ha dado un paso inesperado para la electrificación mostrando en el IAA de Múnich un vehículo con batería de estado sólido, pero no es un coche: es una moto, la Ducati V21L de la competición MotoE.
Esta Ducati es el primer vehículo del grupo que funciona con una batería de litio-metal de estado sólido desarrollada por QuantumScape y PowerCo. Durante la presentación la moto solo recorrió unos pocos metros, pero representa un avance tecnológico importante en baterías, que prometen más autonomía y tiempos de carga mucho menores que las baterías convencionales actuales.
Volkswagen detalló que “PowerCo, Ducati y Audi han equipado una moto 100% eléctrica con esta batería revolucionaria”, y que esto marca un “hito importante en el camino hacia la producción en serie”, aunque reconocen que todavía queda trabajo por hacer.
“Tenemos mucho camino por recorrer, pero estamos en ello. Nuestro objetivo está definido: celdas automotrices comerciales antes de que finalice la década”, afirmó Siva Sivaram, CEO de QuantumScape.
La tecnología de estado sólido reemplaza el electrolito líquido de las baterías habituales por un material sólido. Esto eleva la densidad energética, reduce riesgos de incendio y acelera la carga, pero lleva años siendo difícil de producir en masa por problemas técnicos como la fragilidad del material y la formación de dendritas de litio que pueden dañar la batería.
Resulta llamativo que VW use una Ducati V21L, moto de competición eléctrica MotoE, para esta prueba. Ducati lleva años desarrollando motos eléctricas sin éxito total para las de carretera, debido a peso y autonomía insuficientes, pero las pruebas en MotoE han permitido reducir peso y mejorar rendimiento.
La Ducati mostró un consumo aproximado de 844 Wh/litro y tiempos de carga del 10% al 80% en poco más de 12 minutos, con autonomía suficiente para competir sin agotar la batería. Pero aún no llega al nivel requerido para motos de carretera ligeras y con autonomía práctica.
Este proyecto forma parte de la investigación conjunta dentro del Grupo Volkswagen, donde PowerCo, Audi y Ducati trabajan para llevar estas baterías al mercado. Otras marcas como Toyota, Honda o Nissan también están tras esta tecnología.
La electrificación de motos enfrenta retos mayores que el coche eléctrico, pues el peso y tamaño de la batería impactan mucho más en rendimiento y manejo. Este avance en Múnich abre la puerta a un futuro donde motos deportivas puedan electrificarse sin sacrificar prestaciones.
Por ahora, la demo de la Ducati con batería de estado sólido es más un mensaje tecnológico que un producto listo para vender, pero marca el punto de partida para esta tecnología que podría revolucionar la movilidad eléctrica en España y Europa en los próximos años.
