Dos jóvenes de 21 y 26 años fueron condenados este viernes en Mulhouse tras ser detenidos con 53 kg de cannabis transportados en un tren. El caso revela una nueva táctica utilizada por narcotraficantes para eludir controles en carretera y peajes.
Según la investigación, los traficantes combinan métodos: recogen la droga en coche tras traerla por avión y luego usan el tren para su traslado, intentando pasar desapercibidos bajo el radar policial. Esta estrategia se suma a las tradicionales “go-fast” – vehículos rápidos con coches que abren paso y otros que transportan – y “go-slow”, que consiste en hacer movimientos lentos en vehículos como campers para evitar controles.
Los implicados pasaron cuatro días en custodia antes de llegar a juicio. Su arresto fue posible gracias a una información anónima que alertó a la policía de Mulhouse, crucial para desmantelar esta operación. El tribunal judicial está tomando con rigor este tipo de casos, dado el volumen y la sofisticación del transporte de droga detectado.
El uso del tren como vía para transportar drogas representa un giro en las modalidades conocidas en Francia, haciendo más difícil la labor policial y aumentando los esfuerzos para detectar estas redes.
Las autoridades continúan investigando para desarticular completamente estas rutas y detener a más involucrados en el tráfico que afecta la región de Mulhouse y alrededores.
