Alejandro Aradas, presidente del Concejo de Resistencia, lanzó un llamado urgente para reformar el Código de Tránsito y el Código de Planeamiento Urbano, vigentes desde la gestión anterior y obsoletos frente a las necesidades actuales de la ciudad.
En diálogo con CIUDAD TV, Aradas advirtió que la burocracia estanca obras privadas y habilitaciones comerciales, y genera demoras de hasta décadas para regularizar propiedades. “Los trámites engorrosos espantan a los desarrolladores inmobiliarios y eso limita el crecimiento urbano”, señaló.
El dirigente subrayó que, en un contexto donde la inversión pública escasea, el sector privado debe tener un rol protagónico. “No podemos permitir que los inversores se retiren porque los trámites toman demasiado tiempo. Necesitamos practicidad y agilidad”, sostuvo.
Aradas también recordó la inestabilidad económica argentina y cómo ésta, sumada a la burocracia, dificulta iniciar trámites: “Los empresarios tienen fondos para invertir, pero cuando empiezan a gestionar se encuentran con un circuito técnico engorroso”.
Entonces, el concejal explicó que las reformas requieren consenso político, ya que en el Concejo necesitan mínimo ocho votos para modificar códigos. Actualmente, UCR cuenta con seis y aguardan que la oposición acepte debatir. “Hay resistencia porque consideraban estas normas como un logro de la gestión anterior, pero la urgencia es otra”, afirmó.
Además, remarcó el impacto social de estos atrasos: “Hay edificios en Resistencia que hace 15 o 20 años se construyeron y sus ocupantes aún no tienen título de propiedad, todo por un entramado burocrático provincial y municipal”.
Finalmente, Aradas insistió en la necesidad de abrir el debate para modernizar el marco normativo que rige en Resistencia y asegurar que acompañe el crecimiento y desarrollo de la ciudad.
