Un control realizado este martes por la mañana por la gendarmería de Chalon-sur-Saône sacó a la luz una situación alarmante en un autobús escolar entre Marnay y Saint-Rémy. De 50 alumnos inspeccionados, 35 no llevaban el cinturón de seguridad puesto, lo que representa un 70% de infracción.
La acción forma parte de una campaña continua que los gendarmes iniciaron tras el inicio del curso escolar para sensibilizar y prevenir riesgos relacionados con el uso obligatorio del cinturón en transporte escolar. El autobús circulaba por la ruta que pasa por Varennes-le-Grand antes de llegar al colegio Louis-Pasteur en Saint-Rémy.
Durante el control, un agente vestido de civil junto a un controlador verificó tanto los títulos de transporte como la colocación del cinturón en cada alumno. A pesar del alto porcentaje de incumplimiento, no se presentaron multas, ya que se trató de una medida preventiva. Sin embargo, el no uso del cinturón puede conllevar una sanción económica de 135 euros.
Además, el conductor del autobús fue sometido a pruebas de detección de alcohol y estupefacientes con resultado negativo, descartando cualquier riesgo añadido en la conducción.
Este control revela un problema serio de seguridad vial en el transporte escolar local y subraya la necesidad de reforzar la conciencia entre alumnos, familias y responsables de transporte.
