Dos activistas colombianas fueron retenidas hoy por fuerzas israelíes cuando viajaban a bordo de la Flotilla Global Sumud, una embarcación humanitaria que intentaba entregar ayuda en Gaza.
Se trata de Manuela Bedoya y Luna Barreto, quienes fueron interceptadas a unas 150 millas náuticas de la costa de Gaza, en una zona considerada de alto riesgo donde expediciones previas han sido atacadas o bloqueadas.
La delegación colombiana en la flotilla calificó la detención como una violación al derecho internacional y a los acuerdos de Ginebra. En un comunicado, denunciaron que las activistas fueron detenidas en una “misión pacífica y legal” y exigieron su liberación inmediata.
“Nuestro gobierno ha reiterado: Si Palestina muere, la humanidad muere con ella. Demandamos la liberación inmediata de nuestras compañeras Manuela y Luna, su protección y retorno seguro”, afirmó el comunicado oficial.
El mensaje de alerta se viralizó en redes sociales con reportes en tiempo real desde la embarcación, incluyendo videos de la acosada flotilla rodeada por buques militares israelíes.
Ante esta situación, la delegación convocó a protestas en las sedes de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), señalando los vínculos económicos entre esta organización, la misión económica oficial de Israel en Colombia y sectores que, según ellos, se benefician del conflicto en Gaza.
“Si bloquean la ayuda humanitaria, bloqueamos el flujo económico. Todos los ojos en Gaza. Nos vemos en las calles”, concluyó el comunicado, haciendo un llamado urgente a movimientos estudiantiles y organizaciones sociales para movilizarse.
La detención de Bedoya y Barreto ocurre apenas horas después de que el presidente Gustavo Petro advirtiera públicamente sobre el riesgo que corría la flotilla enviada para ayudar al pueblo palestino bajo el bloqueo en Gaza.
Hasta ahora, las autoridades colombianas no han emitido información oficial adicional sobre la situación ni sobre negociaciones para la liberación de las activistas.
Este caso vuelve a tensar las relaciones diplomáticas y políticas entre Colombia e Israel, mientras continúa la crisis humanitaria en Gaza.
