Surrey County Council se enfrenta a una factura récord de £1,6 millones para reparar un socavón de 20 metros en Godstone High Street, que lleva cerrado desde febrero y ha paralizado negocios locales.
La cifra total es más del doble que el gasto medio de otros consejos en socavones y representa más de un cuarto del coste total en el Reino Unido desde 2020, cuando se han registrado más de 7,000 casos y un desembolso conjunto de £6,2 millones.
Surrey destaca por ser el mayor gastador con más de £3,1 millones invertidos en este problema, casi la mitad del total nacional. Solo en Godstone, ya han ido £850,000 en reparaciones de emergencia, encuestas y gastos iniciales, incluyendo £360,000 solo en el establecimiento de la zona.
Los trabajos de estabilización, relleno de túneles mineros subterráneos y reparación final pueden sumar otros £800,000, según el plan del consejo. Esto se debe a la geología particular de la zona: el subsuelo está formado por la Folkestone Sandstone Formation, una arena débilmente cementada, junto con minas de arena antiguas que empeoraron el colapso.
La British Geological Society confirma que Surrey es especialmente vulnerable a estos hundimientos, un problema que se está extendiendo por todo el Reino Unido, con otros focos de gasto en Reading, East Sussex y Escocia.
El consejo asegura que Godstone High Street reabrirá para Navidad, con una inspección final prevista para el 16 de diciembre. Sin embargo, residentes y comerciantes siguen escépticos tras meses de caos, desvíos y caída de ventas.
“Este es un incidente altamente complejo que requiere la colaboración de varios equipos especializados y las compañías de servicios públicos”, explicó un portavoz de Surrey County Council. “Estamos trabajando para rellenar los túneles y estabilizar la zona para una reparación definitiva.”
Los últimos residentes afectados por la zona cerrada podrán regresar a sus casas para finales de septiembre, según las últimas actualizaciones del consejo. Mientras tanto, Surrey continúa siendo el epicentro nacional del gasto en socavones, un problema que aumenta en todo el Reino Unido y que cuesta millones cada año.
