La reforma energética 2024 en México enfrenta un serio obstáculo: el retraso en la publicación de reglamentos clave que condicionan las inversiones privadas en hidrocarburos y electricidad.
El Consejo Mexicano de la Energía (Comener) alertó que, pese a la apertura del sector a esquemas mixtos entre el Estado y privados, la falta de normativa clara y vigente genera incertidumbre y riesgos que podrían paralizar proyectos.
Tras la promulgación de leyes secundarias el 19 de marzo, se estableció un plazo de 180 días para emitir reglamentos en áreas fundamentales como hidrocarburos, planeación energética y biocombustibles. Ese plazo finalizó en septiembre, pero ninguno ha sido publicado.
Juan Acra, presidente de Comener, explicó que este vacío normativo aumenta la discrecionalidad en la operación del sector. “Sin reglas claras, transparentes y mecanismos efectivos de resolución de conflictos, la inversión privada dudará en comprometer capital”, advirtió.
La reforma supone que Pemex mantenga al menos el 40% de participaciones en asignaciones petroleras, mientras que la CFE podrá formar asociaciones mixtas para generar electricidad. Sin embargo, el éxito de esta estrategia depende de un marco regulatorio sólido y predecible.
Además, la creación de la Comisión Nacional de Energía (CNE) en sustitución de la extinta Comisión Reguladora de Energía (CRE) es clave. Comener destaca que la CNE debe operar con independencia técnica, eficiencia administrativa y criterios objetivos para evitar vaivenes políticos en las decisiones.
El retraso no solo limita la certidumbre, sino que amenaza con frenar esfuerzos para revertir decadencia en producción petrolera y expandir capacidad eléctrica para el crecimiento económico que exige más energía confiable y limpia.
Comener envió un mensaje directo a las autoridades: sin reglas claras y reglamentos publicados, la reforma energética corre el riesgo de naufragar, afectando la seguridad energética y el desarrollo nacional.
“Desde Comener insistimos en que sin inversión no hay desarrollo en ningún otro rubro,” concluyó Juan Acra.
La cuenta regresiva para el sector energético sigue abierta y el reloj marcha para que el gobierno publique los reglamentos pendientes y defina el rumbo de la nueva etapa energética del país.
